lunes, 29 de diciembre de 2014

Benavente: La Pradera.


Muchas personas de Benavente, sobre todo los de edad avanzada, recuerdan con cierta nostalgia este paraje verde que se encontraba al oeste de la ciudad, ya en la vega, y  que llamaban Pradera. Muy cerca de ella estaba la Fuente Mineral. 
Vista amplia de gran parte de la antigua Pradera. Década de 1970.
Grupo de personas, algunas sentadas sobre el césped, en la Pradera.
Por aquellos años, década de 1990, pocos se imaginaban que todo aquel espacio se iba a convertir en un moderno parque natural, con piscinas incluidas, para su disfrute principalmente durante los meses de verano.
Situada en la vega del Órbigo y muy cerca de la ciudad, la Pradera, así denominada, no era más que un prado, siempre verde, con árboles, algunos de ellos centenarios, y rodeado por los cauces del Caño de los Molinos que , al llegar a este lugar, desde el río Órbigo, forman una pequeña isla. En la pradera había algunas casas o casetas de pequeño tamaño, que se utilizaban como bar o cantina. Es el caso del merendero La Bombilla que vemos en una de las imágenes. Y es que a este lugar bajaba mucha gente cada día, aunque más los domingos y días festivos, por la Cuesta del Río o desde otra parte de la ciudad, a pasear, jugar al futbol, o a la rana, muy en uso por entonces, y también a otros deportes populares y autóctonos.
Preparados, y con la vianda, para merendar  en la Pradera.
El merendero La Bombilla, muy concurrido casi siempre.
O simplemente, como ocurría en los meses del verano, a refrescar junto al Caño o Ría, y a la sombra  de los árboles y demás vegetación existente. Además en el bar o mesón podían tomar su vino o caña de cerveza acompañada de una tapa de pulpo o tortilla…Y en alguna fechas especiales hasta se organizaban bailes populares en dicho lugar.
Fiesta campestre. Las mesas ya preparadas. (Foto libro Benavente y Valles).
Equipo de Futbol. Partido de homenaje a la vejez. (F. libro Benavente y Valles)
Así pasaban muchos benaventanos gran parte de su tiempo de fiesta, diversión o entretenimiento, “bajando  a la Pradera”, como decían cuando lo hacían por la cuesta del Río. Y lo siguen diciendo todavía algunos, a pesar de quedar pocos restos de la misma, tal y como se encontraba por entonces.
La Pradera era como un hito en la ciudad, algo destacado y conocido por todos. Por eso, cuando, en la década de 1990, la administración local proyecta remodelar dicho lugar  y construir un nuevo parque natural con piscinas, muchas personas de la ciudad se oponen y se posicionaron a favor de mantener la Pradera, tal y como estaba, aunque con las debidas reparaciones en lo que fuese necesario.  Y hasta se manifestaron por calles y plazas. Es llamativo que muchos de los manifestantes fuesen precisamente personas mayores.
Manifestación Pro Pradera. Década de 1990. Plaza de Santa María.
Pasando por la Rúa.
La manifestación llega a la Plaza Mayor, por entonces no lugar para aparcar.
Otra imagen de la manifestación en la Plaza Mayor, sin coches.
Decían ellos, no sin razón, que había otros muchos lugares en los alrededores de Benavente muy apropiados para la construcción de dicho parque natural y acuático. Efectivamente hay zonas más secas y áridas, y no tan húmedas como la Pradera, que podían haber servido para ello. Y si una de ellas se convertía o transformaba en zona verde con árboles, vegetación, jardines y piscinas, la ciudad contaría con una infraestructura más de este tipo. Porque, para ellos, la Pradera y el lugar en el que se encontraba ya cumplía su función, la que siempre había tenido.
Pero la construcción, y nueva remodelación del lugar, siguió adelante y en la actualidad se cuenta con parque natural y acuático en buenas condiciones, pero que ha supuesto un gran cambio en dicho espacio, desde el punto de vista natural y paisajístico. Hasta los colores de piscinas y toboganes destacan desde  lejos en medio del verdor de los chopos, algunos centenarios que aún se conservan, y demás vegetación con flores o sin ellas. Tan sólo se mantiene en pie el edificio del encargado del antiguo molino o fábrica de La Sorribas.
Imágenes del Parque Acuático y...
...de una parte del Parque Natural la Pradera.
Casa del molinero, que aún se conserva, debidamente restaurada.
Además de las piscinas de verano se dispone de una piscina climatizada, que se utiliza también durante el resto del año. Todo ello más de acuerdo con el tiempo actual y muy del agrado de los más jóvenes, como es natural. Pero no tanto de las personas mayores, algunas de las cuales todavía siguen acordándose de la antigua Pradera, tal y como estaba, aunque estuviese necesitada de alguna reparación. Piensan muchos que ahora solamente se dispone de imágenes, que sirven para recordarles el lugar, y junto al recuerdo aquellas vivencias, por las que algunos todavía, en la actualidad, seguirían apostando.

Imágenes actuales del Parque Natural de la Pradera.